3 reglas para ser eficiente en la búsqueda laboral
En la era en la que vivimos, esa de la segmentación y los algoritmos, ya no basta con aplicar a cualquier búsqueda laboral.
Para optimizar el tiempo de todos y no desmoralizar en el proceso, el candidato debe aplicar las 3 reglas para ser eficiente en su búsqueda de trabajo.
Leer los requisitos excluyentes del puesto
Esto tiene que ver con la capacidad para comprender no sólo cuáles son los requerimientos del puesto, sino también qué es lo que puede el candidato ofrecer al mismo. Antes de postularse, el candidato debe preguntarse algo más aparte de si te interesa la búsqueda: ¿mi perfil coincide con el que buscan? Postularse a cuanta búsqueda aparezca sólo enlentece la inserción en el trabajo deseado. El candidato se expone a encontrarse con más frustraciones ya que “se postula a muchas búsquedas y NADIE lo llama”. Al mismo tiempo, los reclutadores pierden tiempo estudiando el perfil de un candidato para constatar una vez más que no se adecúa a la búsqueda. El único error en esta situación es no leer los requisitos del puesto.
Cargar los datos personales en portales de trabajo y consultoras en capital humano y mantener esos perfiles actualizados.
Muchas veces puede ser una tarea engorrosa cargar una y otra vez los datos en los portales de trabajo y de consultoras en capital humano. Completar los mismos formularios suena reiterativo y agotador pues “ya está todo en el CV”. Sin embargo, es de vital importancia que el joven profesional se tome ese trabajo por la siguiente razón: a través de los portales, los reclutadores utilizan filtros para encontrar candidatos que se adecúan a las búsquedas. Si los datos no están cargados, o si están desactualizados, automáticamente el candidato queda fuera del radar. Mudanza, un nuevo trabajo, una carrera o algún curso, es una excusa para actualizar el CV. Por no hacerlo, los candidatos se pueden perder muchas oportunidades laborales.
Sumar un valor agregado como candidato.
Si el CV del candidato cumple con todos los requisitos, entonces es hora de sumar un valor agregado como candidato. Cuando el candidato se postula a una búsqueda, debe asegurarse de que vean su CV. Por ejemplo: enviando un mail a la empresa o a la consultora enunciando la postulación a determinada búsqueda. En el Objetivo Laboral se puede resaltar que lo que el candidato busca justamente coincide con lo que ofrecen; y es recomendable que en el Perfil Profesional deje en claro que las cualidades son enriquecedoras y personales. Estos detalles hacen que la candidatura sea más personalizada, que quien lea el CV y el mensaje luego recuerde el nombre del candidato porque algo le llamó la atención. No quedarse sólo con enunciados trillados como “busco crecer profesionalmente” o “quiero nuevos desafíos”, pues de esos habrá un montón. El candidato debe tratar de resaltar qué es lo que se busca, cuáles áreas son de su interés, qué valor agregado es el que se puede aportar.
Es sorprendente la cantidad de gente que queda fuera de un proceso de selección por no tener en consideración estas reglas.
Si bien estos tres puntos pueden parecer básicos, son indispensables para acercar al candidato a lo que está buscando.
